Aire secundario regulable: El aire secundario protege el cristal del humo y de los depósitos de hollín. Garantiza la combustión de los materiales volátiles. El flujo de aire secundario ajustable permite adaptar el funcionamiento del aparato a condiciones de tiro demasiado elevadas.
Combustión prolongada: Capacidad del aparato para funcionar en combustión lenta durante 8 horas sin recarga de combustible y sin intervención externa. Este periodo de tiempo tiene su origen en una reserva de ascuas. Solo hay que recargar el aparato con combustible para reiniciarlo.
Control de aire: Unidad de ajuste centralizado de la combustión con un único mando que ofrece: * una gestión sencilla y equilibrada de todo el aire distribuido, * un mayor control sobre el régimen de fuego (mini, normal y maxi), * controlar el consumo de leña, * una combustión más limpia y eficaz, * un flujo de aire secundario más regular para proteger el cristal, * una interrupción completa del flujo de aire en caso de detención prolongada del aparato.
Cristal limpio: El sistema cristal limpio permite ralentizar el ritmo al que se ensucia el cristal. Una entrada de aire situada en la parte superior del cristal crea una corriente protectora. El aire precalentado se propulsa sobre la superficie del cristal. Inicia la combustión de los gases y de los materiales volátiles, protegiendo así el cristal del humo y de los depósitos de hollín.
